Semblanza de Francisco Dardichón Abello, primera parte

Memorias Que Perduran

30 May 201924:38

Summary

TLDREn esta emotiva entrevista, el Padre Francisco Dardich, sacerdote jesuita originario de Barcelona, relata su vida marcada por la guerra civil española, el exilio, y su posterior vocación religiosa. A lo largo de su relato, comparte sus recuerdos de infancia, su tránsito por diversos trabajos y cómo encontró en los jesuitas su camino hacia la sacerdotaleza. Su experiencia pastoral en Bolivia, en lugares como La Paz, Santa Cruz y Oruro, y su relación con las comunidades, dejan una profunda huella en su vida. También reflexiona sobre su recuperación tras un derrame cerebral, destacando el apoyo y la compasión de los bolivianos en su proceso de sanación.

Takeaways

😀 Padre Francisco Dar Dí nació en Barcelona, España, en 1930, y vivió los primeros años de su infancia en medio de la Guerra Civil Española.
😀 La infancia de Padre Dar Dí estuvo marcada por la escasez y el sufrimiento, incluyendo bombardeos, hambre y la experiencia del exilio en Marsella.
😀 A pesar de las dificultades, Padre Dar Dí recuerda a sus padres con cariño y destacó el amor familiar durante su niñez.
😀 La guerra civil dejó profundas huellas en su vida, pero también lo preparó para comprender el sufrimiento ajeno y compartir su experiencia.
😀 Durante su adolescencia, tuvo que abandonar la escuela a los 16 años para trabajar, y comenzó su carrera laboral en diferentes oficios.
😀 A los 19 años, sintió el llamado a la vida sacerdotal y decidió unirse a los Jesuitas, influenciado por su experiencia en colegios jesuitas.
😀 La posguerra en España fue un período de resurgimiento católico, lo que también influyó en la decisión de Padre Dar Dí de seguir la vida religiosa.
😀 En su llegada a Bolivia, Padre Dar Dí se sintió impresionado por la diversidad cultural, especialmente la diferencia entre La Paz y Santa Cruz.
😀 Padre Dar Dí trabajó como docente de filosofía y teología en la Universidad Católica Boliviana y en otras instituciones educativas en Bolivia.
😀 A pesar de las duras condiciones en algunas regiones como Oruro y Cochabamba, destacó la resiliencia y bondad del pueblo boliviano.
😀 En sus últimos años, Padre Dar Dí sufrió un embolismo que lo dejó sin poder hablar, pero poco a poco se recuperó con la ayuda de su fe y la paciencia de la gente.
😀 La entrevista también hizo hincapié en los recuerdos entrañables de su trabajo pastoral en diferentes parroquias de Bolivia, incluyendo el Pío X.

Q & A

¿Cómo fue la infancia del Padre Francisco Dar durante la Guerra Civil Española?
-La infancia del Padre Francisco Dar estuvo marcada por la dureza de la Guerra Civil Española. Recordó los bombardeos, el hambre y el miedo constante. Su familia vivió el sufrimiento de la guerra, que dejó huellas profundas en su vida, pero también encontró bendiciones en medio de la adversidad, como la cercanía con su familia.
¿Qué recuerdos tiene el Padre Francisco Dar de su exilio en Francia?
-El exilio en Francia fue una experiencia traumática para el Padre Francisco Dar, pero también una bendición. Aunque vivió el hambre y la privación, esta experiencia le permitió comprender mejor las dificultades de los demás y compartir estas vivencias en su vida posterior.
¿Qué lecciones aprendió el Padre Francisco Dar de su trabajo en su juventud?
-El Padre Francisco Dar aprendió muchas lecciones de trabajo y superación personal durante su juventud. A pesar de tener que abandonar los estudios a los 16 años, trabajó en diferentes empleos, lo que le permitió comprender las dificultades de la vida laboral y desarrollar empatía hacia las personas que enfrentan desafíos similares.
¿Por qué decidió el Padre Francisco Dar unirse a la congregación de los jesuitas?
-El Padre Francisco Dar decidió unirse a los jesuitas porque era lo que más conocía a través de su educación. A lo largo de su vida, estuvo influenciado por los jesuitas y su vocación fue fortalecida por su cercanía a ellos, especialmente por su sobrino, que ya estaba involucrado en la congregación.
¿Cómo describe el Padre Francisco Dar su llegada a Bolivia?
-El Padre Francisco Dar recuerda su llegada a Bolivia como una experiencia impactante. En La Paz, fue testigo de la gran pobreza y las dificultades, pero también de la amabilidad y la calidez de la gente. La vida en Bolivia, especialmente en lugares como Sucre y Santa Cruz, dejó una huella profunda en su corazón.
¿Qué papel jugó el Padre Francisco Dar en la educación en Bolivia?
-El Padre Francisco Dar desempeñó un papel importante en la educación en Bolivia, principalmente como docente de filosofía. Enseñó en la Universidad La Salle en La Paz y trabajó en diversas regiones del país, siempre buscando transmitir valores y educación a la juventud boliviana.
¿Qué le impresionó más del pueblo boliviano durante su tiempo en el país?
-Lo que más le impresionó del pueblo boliviano fue la bondad y la resiliencia de su gente. A pesar de las dificultades económicas y sociales, el Padre Francisco Dar destacó el coraje y la esperanza de los bolivianos en medio de la adversidad.
¿Qué dificultades enfrentó el Padre Francisco Dar en su vida en Bolivia?
-El Padre Francisco Dar enfrentó varias dificultades en Bolivia, incluyendo la pobreza en las comunidades donde trabajaba. Sin embargo, lo que más le impactó fueron las grandes desigualdades sociales y la lucha diaria de las personas para sobrevivir, lo que le fortaleció en su misión de servir a los demás.
¿Cómo afectó la salud del Padre Francisco Dar durante su estancia en Bolivia?
-El Padre Francisco Dar sufrió una embolia que le dejó sin poder hablar durante un tiempo. A pesar de esta grave dificultad, encontró consuelo y apoyo en la oración y en la paciencia de los bolivianos, quienes lo ayudaron a superar este reto y le mostraron una gran compasión.
¿Cuál fue la impresión del Padre Francisco Dar sobre Santa Cruz?
-El Padre Francisco Dar tiene buenos recuerdos de Santa Cruz, donde vivió una experiencia de trabajo pastoral. La gente era muy amable y la parroquia era un lugar activo. Aunque Santa Cruz contrastaba con otras regiones del país, el Padre Francisco valoró la calidez y el espíritu de la comunidad.