¿Qué es el estrés, qué produce el estrés y cómo podemos afrontarlo?

Summary

El estrés, como fenómeno fisiológico, involucra una activación general del organismo que afecta a diversas funciones del cuerpo, desde el sistema nervioso hasta el sistema inmunológico. El proceso de adaptación al estrés se divide en tres fases: alarma, resistencia y agotamiento, cada una con efectos específicos en la salud. La fase de alarma prepara al cuerpo para una respuesta rápida, mientras que las fases de resistencia y agotamiento pueden llevar a trastornos psicofisiológicos. A largo plazo, el estrés contribuye a cambios en hábitos, problemas de salud y alteraciones cognitivas, pudiendo desencadenar trastornos físicos y psicológicos como enfermedades cardiovasculares, trastornos respiratorios y ansiedad, entre otros.

Takeaways

• 😀 El estrés implica un aumento general de la activación fisiológica del organismo.
• 😀 Cannon fue el primero en definir el estrés, seguido por Selye quien lo integró en el síndrome general de adaptación.
• 😀 El síndrome general de adaptación consta de tres fases: alarma, resistencia y agotamiento.
• 😀 La fase de alarma se activa ante un estímulo estresante y prepara al cuerpo para una respuesta rápida (lucha, huida o defensa).
• 😀 Si la fase de alarma no resuelve la situación, el cuerpo pasa a la fase de resistencia, manteniendo un nivel alto de activación fisiológica.
• 😀 La fase de agotamiento ocurre cuando el estrés se prolonga y el cuerpo no puede mantener su activación, llevando a trastornos psicofisiológicos.
• 😀 El estrés afecta al cuerpo mediante la activación de mecanismos neuroendocrinos y endocrinos, que incluyen el sistema nervioso simpático y las glándulas suprarrenales.
• 😀 El estrés prolongado puede alterar los hábitos de salud, como fumar, beber y comer en exceso, y reducir comportamientos saludables como hacer ejercicio o dormir lo suficiente.
• 😀 Los efectos negativos del estrés incluyen disfunciones psicofisiológicas como dolores de cabeza, problemas cardiovasculares, digestivos y sexuales, así como una depresión del sistema inmunológico.
• 😀 El estrés también puede inducir trastornos cognitivos como errores de pensamiento y ansiedad, que pueden resultar en ataques de pánico, fobias y depresión.
• 😀 Los trastornos asociados al estrés, como los cardiovasculares, respiratorios, gastrointestinales, dermatológicos y musculares, son multifactoriales y no tienen una causa única, aunque el estrés es un factor relevante en su desarrollo.

Q & A

¿Quiénes fueron los primeros en definir el concepto de estrés y qué aportaron?

El concepto de estrés fue inicialmente definido por Cannon y más tarde expandido por Selye. Cannon introdujo la idea de la activación fisiológica frente al estrés, mientras que Selye formuló el concepto del síndrome general de adaptación, que describe el proceso de adaptación del organismo ante situaciones estresantes.

¿Cuáles son las tres fases del síndrome general de adaptación según Selye?

Las tres fases del síndrome general de adaptación son: 1) Fase de alarma, donde el organismo percibe el estrés y activa una respuesta fisiológica; 2) Fase de resistencia, cuando el organismo intenta mantener un equilibrio ante la situación; y 3) Fase de agotamiento, cuando el estrés prolongado agota los recursos del cuerpo y pueden surgir enfermedades relacionadas con el estrés.

¿Qué ocurre en la fase de alarma del estrés?

En la fase de alarma, el organismo responde al estímulo estresante activando el sistema nervioso simpático. Esto provoca un aumento de la frecuencia cardíaca, presión sanguínea, respiración acelerada, y un redireccionamiento de la sangre hacia los músculos esqueléticos, entre otros efectos fisiológicos, preparándose para una respuesta de 'lucha o huida'.

¿Cómo se caracteriza la fase de resistencia del estrés?

En la fase de resistencia, el organismo sigue manteniendo un nivel alto de excitación fisiológica, pero intenta restablecer un equilibrio homeostático. Si este equilibrio se alcanza, el proceso de estrés puede finalizar, pero si no, el organismo se desgasta y puede pasar a la fase de agotamiento.

¿Qué sucede durante la fase de agotamiento del estrés?

Durante la fase de agotamiento, el organismo ya no es capaz de mantener la alta activación fisiológica. Se pierde el equilibrio homeostático y surgen enfermedades relacionadas con el estrés, como trastornos psicofisiológicos, debido a la prolongada activación del cuerpo sin un alivio adecuado.

¿Cuáles son algunos de los efectos negativos del estrés sobre la salud física?

El estrés puede causar una serie de problemas de salud como dolores de cabeza, problemas cardiovasculares (como hipertensión y enfermedad coronaria), trastornos digestivos (como síndrome de colon irritable), disfunciones sexuales, y debilidad en el sistema inmunológico, lo que aumenta la vulnerabilidad a infecciones y enfermedades más graves como el cáncer.

¿Cómo puede el estrés afectar la salud mental de una persona?

El estrés prolongado puede dar lugar a trastornos emocionales como la ansiedad, ataques de pánico, fobias y depresión. Además, afecta los procesos cognitivos, alterando la atención, la memoria, la toma de decisiones, lo que puede llevar a un deterioro en el rendimiento académico o laboral.

¿Qué cambios en los hábitos de vida puede generar el estrés?

El estrés puede inducir comportamientos poco saludables, como un aumento en el consumo de tabaco, alcohol y comida en exceso. Además, puede llevar a una disminución en la práctica de ejercicio físico, una mala alimentación y problemas de sueño, lo que agrava los efectos negativos sobre la salud.

¿De qué manera el estrés influye en el sistema inmunológico?

El estrés prolongado puede provocar inmunosupresión, debilitando el sistema inmunológico. Esto aumenta el riesgo de infecciones, como resfriados y gripe, y también puede contribuir al desarrollo de enfermedades autoinmunes o incluso ciertos tipos de cáncer.

¿Qué trastornos son comunes como consecuencia del estrés en el ámbito clínico?

Entre los trastornos asociados al estrés se encuentran enfermedades cardiovasculares como la hipertensión, trastornos respiratorios como el asma, trastornos gastrointestinales como el síndrome de colon irritable y úlceras, problemas endocrinos como la diabetes, y trastornos dermatológicos como la psoriasis. Además, el estrés también puede afectar al sistema musculoesquelético, causando dolores musculares y contracturas.