Por qué la América española se dividió en muchos países y Brasil quedó en uno solo | BBC Mundo
Summary
TLDREl Tratado de Tordesillas en 1494 dividió las colonias americanas entre España y Portugal, estableciendo el control español en América y portugués en Brasil. A diferencia de la fragmentación de América Española, Brasil mantuvo su unidad gracias a su organización territorial y religiosa, y la política de integración de las élites locales. La invasión napoleónica alteró la dinámica colonial, llevándola a la independencia. Mientras Brasil se consolidó bajo un imperio con la familia real portuguesa, las colonias españolas se dividieron en múltiples países, marcando el inicio de su consolidación política y cultural hasta el siglo XX.
Takeaways
- 🏴☠️ En el siglo XV, España y Portugal compitieron por el control comercial y religioso del mundo, lo que llevó a la firma del Tratado de Tordesillas en 1494.
- 🌎 La división del mundo en el Tratado de Tordesilla permitió a Portugal el control del este y a España el oeste, influenciando la expansión colonial en América.
- 🇵🇹 Brasil cayó bajo el dominio de Portugal tras la llegada de Pedro Álvares Cabral en 1500, mientras que el resto de América Latina quedó bajo el control de España.
- 📜 La América Española se fragmentó en múltiples países tras su independencia, a diferencia de Brasil, que quedó unificado bajo un solo territorio.
- 🗺️ La organización territorial y la centralización en Brasil facilitó una mayor integración y cohesión en comparación con la compleja estructura de la América Española.
- ⛪ La Iglesia Católica jugó un papel fundamental en el control de la vida cotidiana y política en ambas colonias, pero con diferencias en su organización geográfica.
- 👥 La sociedad colonial estaba compuesta por una élite de ascendencia europea, una gran cantidad de mestizos y trabajadores esclavizados, todos sometidos a la autoridad de un lejano monarca.
- 👑 Las dinastías Borbón en América Española y Braganza en Brasil tuvieron un impacto significativo en la estructura política y social de las colonias.
- 🏛️ La diferencia en la organización del poder político y la educación entre las élites de Brasil y las de Hispanoamérica influyó en sus trayectorias hacia la independencia.
- 🤝 La integración de las élites brasileñas con la metrópoli a través de la educación en Portugal y la abolición de monopolios comerciales fortalecieron la unidad nacional.
- 👑 La independencia de Brasil se logró con la participación activa de la familia real portuguesa, lo que contrasta con la fragmentación de la América Española tras la independencia.
- 🌐 Las ideas emancipadoras y las guerras napoleónicas fueron factores clave en la desintegración de las colonias españolas y el establecimiento de gobiernos locales en Hispanoamérica.
Q & A
¿Cuál fue el contexto histórico que llevó a la disputa entre España y Portugal por el control del Nuevo Mundo?
-En el siglo XV, España y Portugal eran las grandes potencias marítimas que se disputaban el control comercial y religioso del mundo, lo que llevó a una pelea arbitrada por la Iglesia Católica para determinar quién tenía derechos sobre los territorios del Nuevo Mundo.
¿Cómo se resolvió la disputa territorial entre España y Portugal en el Nuevo Mundo?
-Tras duras negociaciones, España y Portugal acordaron repartirse el globo mediante el Tratado de Tordesillas, trazando una línea divisoria que asignaba a Portugal lo que quedaba al este y a España lo que quedaba al oeste.
¿Por qué Brasil quedó bajo el control de Portugal y no de España tras su descubrimiento?
-Según el Tratado de Tordesillas, Brasil cayó bajo el control de Portugal ya que se encontraba al este de la línea divisoria establecida en el tratado.
¿Cómo se organizaron los territorios en Brasil durante la colonización portuguesa?
-Para facilitar el control, Portugal separó la colonia en dos y la dividió en capitanías generales con centros de poder en ciudades costeras, lo que facilitó la relación entre las élites políticas en diferentes puntos de poder.
¿En qué se diferenciaba la organización territorial de la América Española en comparación con Brasil durante la colonización?
-La América Española era más extensa y estaba dividida en 4 virreinatos y 4 capitanías generales, con una organización más compleja y fragmentada, y con poca comunicación entre ellas debido a la prohibición de relaciones comerciales entre ellas.
¿Cómo influyó la Iglesia Católica en la organización y la vida de las colonias españolas y portuguesas?
-La Iglesia Católica tenía un rol fundamental en el control de la vida cotidiana y política en ambas colonias. En Brasil, estaba organizada alrededor de un solo arzobispado, lo que reforzaba los vínculos entre las diferentes partes del territorio, mientras que en la América española estaba dividida en cinco arzobispados, contribuyendo a una mayor independencia territorial.
¿Cómo se relacionaban las élites políticas en Brasil con el poder local y la metrópoli portuguesa?
-En Brasil, el poder político de las élites estaba basado en el control de tierras y en el aparato burocrático. A pesar de que inicialmente los 'reinóis' ocupaban los cargos más altos, a mediados del siglo XVIII la distinción entre ellos y los brasileños nacidos en la colonia se había desvanecido, y la corona portuguesa había hecho decretos para ampliar el acceso de los brasileños al poder político local.
¿Qué diferencias marcaron la relación entre las élites políticas y la corona en Brasil y Hispanoamérica?
-En Brasil, las élites locales se integraron más con la metrópoli y el poder local, mientras que en Hispanoamérica, la distinción social entre las élites (peninsulares y criollos) era más marcada, lo que llevó a un sentimiento de discriminación y a la eventual liderazgo de las guerras de independencia por parte de los criollos.
¿Cómo impactaron las guerras napoleónicas en la relación entre las colonias americanas y las coronas de España y Portugal?
-Las guerras napoleónicas crearon un vacío de poder en las colonias, lo que permitió a las élites criollas de Hispanoamérica crear sus propios gobiernos locales y promover movimientos emancipatorios, mientras que en Brasil, la llegada de la familia real portuguesa reforzó la unidad y la identidad nacional, llevando a la independencia con la participación de la misma familia real.
¿Cómo se mantuvo Brasil unificado después de su independencia, a diferencia de la América Española?
-Brasil logró mantenerse unificado tras su independencia gracias a la presencia de la familia real portuguesa, la creación de una nueva monarquía con D. Pedro I como emperador, y la reacción de las élites locales ante la posibilidad de una revuelta general, lo que les permitió mantener sus privilegios y la estructura de la esclavitud.
¿Cuáles fueron algunos de los proyectos unionistas en Hispanoamérica después de la independencia y por qué fracasaron?
-Hubo proyectos como la Gran Colombia liderada por Simón Bolivar y las Provincias Unidas del Río de La Plata, que buscaban una monarquía bajo un rey europeo. Estos fracasaron debido a la falta de experiencia compartida de gobierno, la complejidad de unificar territorios vastos y la falta de poder militar para imponer un liderazgo统一.
Outlines
🏴☠️ La Disputa Colonial y el Tratado de Tordesillas
El primer párrafo aborda la rivalidad entre España y Portugal en el siglo XV, dos naciones que buscaban dominar el comercio y la expansión religiosa mundial. Tras el regreso de Cristóbal Colón, se desató una disputa por el control de los nuevos territorios descubiertos, la cual fue arbitrada por la Iglesia Católica, resultando en el Tratado de Tordesillas. Este tratado estableció una línea divisoria en el océano Atlántico, asignando territorios al este a Portugal y al oeste a España. Este acuerdo influenció la futura organización política y social de América Latina, con Brasil bajo el control de Portugal y el resto de América bajo la corona española.
🌎 Diferencias en la Organización Colonial y Consecuencias
El segundo párrafo compara las diferencias en la organización de los territorios coloniales de Portugal y España y sus consecuencias. Portugal dividió Brasil en dos para facilitar el comercio, mientras que España tenía una estructura más compleja y fragmentada, con virreinatos y capitanías generales que no permitían relaciones comerciales entre ellas. La organización de la Iglesia Católica también varió, con un solo arzobispado en Brasil que reforzó la unión, frente a múltiples arzobispados en la América española que contribuyeron a una mayor independencia. Además, se discute la estructura social de ambas colonias, compuestas por una minoría de ascendencia europea y una gran población de mestizos y esclavos, y cómo la dinastía de los Borbones y Braganza influyó en la identidad y la independencia de estas regiones.
👑 Impacto de las Reformas y la Guerra de la Independencia en las Américas
El tercer párrafo explora cómo las reformas de Carlos III y las guerras napoleónicas impactaron las colonias americanas. Las reformas centralistas de España aumentaron la discriminación y resentimiento de los criollos, quienes perdieron influencia política y económica. La invasión de Napoleón a España dejó un vacío de poder que los criollos utilizaron para promover la independencia. Mientras Brasil se unificó bajo la monarquía de los Braganza tras la llegada del rey João VI, Hispanoamérica se fragmentó en múltiples guerras de independencia, con juntas de gobierno y líderes como Simón Bolívar. Finalmente, se mencionan los intentos fallidos de unión en Hispanoamérica y la formación de 18 estados independientes.
Mindmap
Keywords
💡Siglo XV
💡Cristóbal Colón
💡Tratado de Tordesillas
💡División territorial
💡Iglesia Católica
💡Élites políticas
💡Independencia de Brasil
💡Guerras napoleónicas
💡Fragmentación de Hispanoamérica
💡Proyectos unionistas
Highlights
El siglo XV vio a España y Portugal como las principales potencias marítimas en disputa por el control comercial y religioso mundial.
La Iglesia Católica arbitró una pelea entre los dos reinos tras el primer viaje de Colón, resultando en el Tratado de Tordesillas.
El Tratado de Tordesillas dividió el 'nuevo mundo' en territorios portugueses al este y castellanos al oeste de una línea divisoria.
Pedro Álvares Cabral descubrió Brasil en 1500, lo que lo colocó bajo el control de Portugal debido al Tratado.
Los dos imperios coloniales dominaban América durante más de 300 años, pero con desenlaces distintos en su independencia.
La América Española se fragmentó en varios países, mientras que Brasil quedó como un solo.
Las diferencias en la organización de territorios y consecuencias entre los dos imperios fueron clave para sus caminos distintos.
Portugal dividió Brasil en dos para facilitar el comercio, mientras que España tenía una división más compleja y fragmentada.
La Iglesia Católica tuvo un papel fundamental en el control de la vida cotidiana y política en ambas colonias.
En Brasil, una sola arquidiócesis reforzó la unión del territorio, a diferencia de la América española con cinco arquidiócesis.
La sociedad colonial estaba compuesta por una élite de ascendencia europea, mestizos y trabajadores esclavizados.
Las élites políticas en Brasil estaban basadas en el control de tierras y en el aparato burocrático, sin universidades locales.
En Hispanoamérica, la distinción social entre las élites era marcada, con peninsulares y criollos con tensiones.
Las reformas de Carlos III empeoraron la percepción de los criollos y contribuyeron a la independencia.
Las guerras napoleónicas crearon un punto de quiebre en las relaciones entre las coronas ibéricas y sus colonias.
La invasión de Napoleón a Portugal llevó al rey João VI a trasladarse a Río de Janeiro, unificando el poder en Brasil.
Brasil logró su independencia con la participación de la familia real portuguesa, estableciendo una monarquía con D. Pedro I.
La independencia de Hispanoamérica se caracterizó por un proceso de fragmentación y la creación de múltiples estados.
Los proyectos unionistas en Hispanoamérica, como la Gran Colombia, fracasaron y contribuyeron a la formación de varios países.
El período imperial de Brasil después de la independencia marcó intentos de crear una identidad nacional y reprimir movimientos separatistas.
La consolidación de las independencias en las Américas continuó hasta el siglo 20, formando el mapa político, económico y cultural actual.
Transcripts
En el siglo XV, España y Portugal eran las grandes potencias marítimas que se disputaban
el control comercial y religioso del mundo.
Cuando Cristóbal Colón volvió de su primer viaje a América, empezó una pelea entre
los dos reinos, arbitrada por la Iglesia Católica, para ver quién tenía el derecho sobre esos
territorios.
Tras duras negociaciones, acordaron repartirse el globo.
Trazaron una nueva línea que dividía las zonas de navegación del océano Atlántico
y del llamado “nuevo mundo” en el histórico Tratado de Tordesillas.
En él decía que todo lo que quedaba al este de la línea divisoria pasaba a manos de la
corona portuguesa y lo que quedaba al oeste a manos de la corona castellana.
Es por ese acuerdo que, cuando el navegante luso Pedro Álvares Cabral llegó a la actual
costa de Bahía en 1500, Brasil cayó bajo control de Portugal
Los dos imperios coloniales dominaron gran parte del continente durante más de 300 años,
pero acabaron de forma muy distinta.
Al independizarse, la América Española se fragmentó en muchos países y la portuguesa
quedó en uno solo.
¿Pero por qué?
Para entender los distintos rumbos que tomaron Brasil y el resto de América Latina es importante
hablar, a grandes rasgos, de las diferencias entre los dos imperios a partir de mediados
del siglo XVIII.
La primera es la organización de los territorios y las consecuencias que tuvo.
Para facilitar el control de Brasil, Portugal habia separado la colonia en dos.
Esa división fue pensada para integrar más el interior de Brasil al comercio portugués
de ultramar. Las corrientes del océano Atlántico hacían que, desde Maranhao, fuera más rápido
navegar hasta Lisboa.
Además, Brasil estaba dividido en capitanías generales, cuyos centros de poder se concentraban
principalmente en ciudades costeras, como Río de Janeiro, Salvador de Bahía y Recife.
Era relativamente fácil viajar de una a otra, comparado con el imperio español, y eso facilitaba
que hubiese relación entre las élites políticas en los distintos puntos de poder.
La América Española, en cambio, era mucho más extensa y la forma en que estaba dividida,
incluso geográficamente, era más compleja y fragmentada.
Iba de lo que hoy es parte de Estados Unidos hasta al Cono Sur y se dividía en 4 grandes
virreinatos y 4 capitanías generales
El hecho de que España no les permitiera tener relaciones comerciales entre ellos durante
siglos hizo que tuvieran pocos vínculos y se administrarán de forma local.
Otro elemento importante era la Iglesia Católica.
Tanto en las colonias españolas como en la portuguesa tenía un rol fundamental en el
control de la vida cotidiana y política.
En Brasil, estaba organizada alrededor de un solo arzobispado, el de Bahía. Eso reforzaba
los vínculos entre las diferentes partes del territorio portugués, que respondían
ante un solo centro religioso.
En la América española, en cambio, la Iglesia estaba dividida en cinco arzobispados, lo
que contribuía a que la organización de los territorios españoles fuera aún más
independiente.
¿Y qué pasaba con la gente?
Ambas sociedades estaban formadas principalmente por una élite minoritaria de ascendencia
europea, una enorme población de mestizos que transitaban entre estratos sociales y
trabajadores esclavizados, que podían ser indígenas o africanos.
Pues bien, todos estaban sujetos al poder de un rey, que se encontraba a miles de kilómetros.
En ese momento,
América española estaba bajo la dinastía de los Borbones y Brasil bajo la de Braganza.
Otra diferencia entre las colonias eran las élites políticas
y su relación con el poder local.
En Brasil, el poder político de las élites estaba basado en el control de tierras - por
parte de una oligarquía terrateniente - y en el aparato burocrático - formado por jueces
y magistrados.
La corona portuguesa no permitía que se abrieran universidades en Brasil.
Se cree que era una forma de control intelectual,
una manera de evitar que eso fuera un germen de demandas
independentistas.
Así que los burócratas se tenían que educar principalmente en Portugal, en concreto en
Coimbra.
El hecho de que todos estudiaran en la universidad portuguesa ayudó a tejer relaciones entre
las élites locales brasileñas y cimentó su identificación con la metrópoli.
Aunque los nacidos en Portugal, los llamados "reinóis", solían ocupar los cargos más
altos de la administración pública, en el siglo XVIII ya no había tanta distinción
entre ellos y los brasileños, los nacidos en la colonia.
En el pasado la relación entre estos dos grupos había sido tensa, pero lo que contribuyó
a esa integración fue el hecho de que la Corona hizo decretos para ampliar el acceso
de los brasileños al poder político local.
Y eso es importante porque fue justamente lo contrario de lo que ocurrió en Hispanoamérica.
Allí la distinción social entre las élites era mucho más marcada.
Por un lado estaban los peninsulares: venían de España y eran la minoría que ocupaba
altos cargos políticos y administrativos.
Por el otro, estaban los españoles nacidos en América, los llamados criollos.
Muchos eran terratenientes, ganaderos o comerciantes y ya a mediados del siglo XVIII eran los que
tenían el poder económico. A pesar de eso, ocupaban los puestos más bajos en la administración.
Se sentían discriminados porque, aunque también eran españoles y tenían recursos, no estaban
involucrados en los asuntos gubernamentales de más alto nivel.
Esta percepción empeoró tras las reformas de Carlos III, que buscaban recrudecer la política
centralista de España en las colonias.
Algunos de los cambios impulsados por este rey Borbón supusieron la reestructuración
de la administración colonial y la subida de impuestos en América.
Uno de los motivos es que España sufría una profunda crisis económica y necesitaba
dinero para financiar las guerras contra otras potencias como Inglaterra.
Esto aumentó la indignación de los criollos, que veían la corona como un lastre que se
dedicaba a expoliar sus ganancias.
Además, con estas reformas, y al contrario de lo pasó con Brasil, los criollos también
empezaron a perder sus puestos en la administración local a favor de los peninsulares.
Este contexto favoreció la toma de conciencia de las élites criollas, que serían las que
más tarde liderarían las guerras de independencia.
Durante estos años, también empezaron a circular en el continente las ideas que cuestionaban
la autoridad de las monarquías europeas y de la Iglesia, promovidas por las guerras
de independencia en Estados Unidos y en Haití y por la Revolución Francesa.
Y en ese escenario, las guerras napoleónicas fueron un punto de quiebre en la relación
entre las coronas de la Península Ibérica y sus colonias americanas.
Empecemos por lo que pasó en la colonia portuguesa, que a estas alturas ya había sido unificada
en un solo território, Brasil.
En 1808, las tropas de Napoleón invadieron Portugal y la familia real portuguesa huyo
a Río de Janeiro.
El rey Joao VI se llevó consigo a toda la corte, los archivos, la tesorería, las bibliotecas
reales y 15.000 personas.
Esto es muy significativo para entender la unidad del país.
La llegada de los Braganza a Brasil era un caso único en el mundo: nunca antes un monarca
europeo se había trasladado a América.
Por el propio interés de la monarquía, Dom Joao VI abolió el monopolio comercial de
Portugal, abrió los puertos y permitió a Brasil tener su propia manufactura.
El rey fue un paso más allá y creó el Reino Unido de Portugal, Brasil y Algarves.
Es decir, Brasil pasaba a ser el nuevo centro de poder de la corona y Río de Janeiro la
capital del imperio.
Ahí se instalaron grandes instituciones como el Consejo de Estado y la Corte Suprema, entre
otras. También se abrieron las primeras universidades.
Con el fin de la dominación francesa, en Portugal empezaron revueltas que pusieron
presión a Dom Joao para que regresara a Lisboa y estableciera una monarquía constitucional.
Así lo hizo. En 1821 dejó a cargo a su hijo, el príncipe regente Dom Pedro.
Pero las cortes portuguesas ponían presión para que Brasil volviera a su estatus original
de colonia y exigían el regreso de Dom Pedro
por miedo a que liderara un movimiento independentista.
Pero las batallas contra los portugueses ya habían empezado en Pernambuco en 1821.
Y Dom Pedro terminó por desafiar a las Cortes y declarar la independencia de Brasil en 1822.
Este fue quizás la principal razón por la que Brasil llegó unificado a su ruptura con
Portugal.
La independencia se consiguió con la participación de la misma familia real portuguesa, que ya
tenía una corte e instituciones establecidas en la colonia.
Y habia reprimido revueltas de las élites locales, que, en los años anteriores, habían
intentado pedir más autonomía y pagar menos impuestos.
¿Pero cómo Brasil logró mantenerse como un sólo país después de la independencia?
Brasil era el país del mundo con más esclavos y la reciente independencia de Haití — que
había estado liderada por esclavos — asustaba a parte de las élites.
El establecimiento de una nueva monarquía central, con D. Pedro I como emperador, era
una forma de mantener el orden público ante una potencial revuelta.
Durante el imperio, hubo rebeliones que buscaban separar partes de Brasil o convertirse en
repúblicas.
Pero para la corona fue más fácil reprimirlas ya que las élites locales no las apoyaban
completamente, por miedo de que un desorden social les quitara el poder.
O sea, tener el país unificado bajo un único gobierno en aquel momento hizo que las élites
lograran mantener sus privilegios y la estructura de la esclavitud.
¿Y cómo impactó la invasión napoleónica a Hispanoamérica?
Napoleón Bonaparte también invadió España en 1808.
El rey Carlos IV y su hijo, Fernando VII, abdicaron a favor del general francés.
Y Napoleón cedió el trono a su hermano que se coronó como José I.
Pero en las colonias, la élite criolla no reconoció al nuevo monarca francés.
Esto dejó un vacío de poder en las colonias que los criollos aprovecharon para crear sus
propios gobiernos locales, las llamadas juntas de gobierno, y promover movimientos emancipatorios.
Así es como en 1809 empezó una oleada independentista
y la región entró en un largo y complicado
proceso de fragmentación.
A diferencia de los vecinos brasileños, estos territorios no tenían una experiencia compartida
de gobierno.
Además, ninguno de los nuevos centros de poder que surgieron durante esta época, como
México o Buenos Aires, tenían poder militar para reunir todo el territorio bajo su liderazgo.
Cuando Fernando VII regresó al poder, en 1814, intentó someter otra vez las colonias
a la corona española, en lugar de garantizar la autonomía que habían conseguido después
de años de autogobierno.
La decisión de Fernando VII profundizó el resentimiento de las élites criollas y le
dió más fuerza a los movimientos pro-independencia.
Las guerras de independencia fueron conflictos armados complejos que durarían
muchos años ...pero ¡este tema daría realmente para otro video!
A pesar de la división que vivió la América Española, también hubo proyectos unionistas
pero estos fracasaron.
Desde la Gran Colombia, formada por las actuales Colombia, Ecuador, Venezuela y Panamá y liderada
por Simón Bolivar.
Hasta las Provincias Unidas del Río de La Plata, que querían una monarquía bajo un
rey europeo, una propuesta que nunca se concretó.
Este territorio se separaría en partes que hoy son Argentina, Paraguay, Uruguay y Bolivia.
En Brasil, el período imperial, que vino después de la declaración de la independencia,
fue marcado por intentos de crear todo un imaginario de identidad nacional y reprimir
violentamente los movimientos que fueran en contra.
En América hispanohablante, acabarían surgiendo 18 Estados, el último país en nacer sería
Panamá en 1903.
Las independencias de las colonias de España y Portugal en las Américas
fueron solo el principio de un proceso de consolidación
que continuaría hasta el siglo 20 dando lugar al mapa político,
económico y cultural que conocemos hoy.
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